Claudia Aguilera reinventa el té con sabor y creatividad

Redacción por: Residente
Fotografía por: cortesía Claudia Aguilera

Apasionada de todo lo que tenga que ver con la gastronomía, y certificada como sommelier de té en Argentina.

¿De dónde eres y a qué te dedicas?

Nací en Guadalajara, pero he vivido en varios lugares de México y otros países, así que soy un poco nómada.

Me apasiona todo lo que tenga que ver con la gastronomía, y hace unos años me certifiqué como sommelier de té en Argentina.

En Hindie, la marca de la que soy cofundadora, me encargo de seleccionar y desarrollar todos los productos que comercializamos, en conjunto con mi equipo. También diseño cursos, maridajes con té y diferentes eventos, combinando siempre el toque gastronómico fresco y divertido para cambiar el concepto que se tiene de esta bebida. De hecho creo que he convertido mis actividades en una misión con el té.

¿Cómo inició tu gusto por la gastronomía?

Mi primer encuentro fue con la repostería. A los diez años comencé a preparar recetas de libros que encontraba en mi casa, y unos años después tomé algunos cursos. Incluso comencé un negocio casero.

Al momento de elegir la carrera, quería estudiar para Chef, pero por varias razones terminé estudiando mercadotecnia. A la semana después de graduarme, comencé a trabajar en un restaurante de alta cocina mexicana llamado La Tequila, en Guadalajara. Después estudié un diplomado en gastronomía para que me aceptaran en la escuela de Hostelería Sant Pol de Mar, en Barcelona, donde hice mi posgrado en Alimentos y Bebidas. Cuando comencé mi carrera como sommlier, mi gusto por la gastronomía se integró completamente a mi estilo de vida.

¿Quiénes te han influenciado más al respecto?

Por supuesto mis abuelas, con todo el amor en sus recetas, y mi madre con su curiosidad por preparar nuevos platillos, donde yo participaba como juez. Son recuerdos positivos que me conectan con la gastronomía.

Cuando estuve estudiando en Barcelona, la comida mediterránea me conquistó. Estar rodeada de los mejores restaurantes, despertó mi paladar a una nueva dimensión. Y sin duda mi pareja, quien es un gran cocinero, y a quien, al igual que a mí, le encanta disfrutar de los pequeños placeres de la vida, como un exquisito platillo en la mesa.

¿Cocinas en tu casa? ¿Qué prefieres preparar?

Sí, intento hacer el mayor número de comidas en casa. Me gusta preparar comida oriental, como arroz o noodles con diferentes combinaciones de ingredientes y especias; y la comida mexicana del Bajío, como aguachiles y tacos de pescado. Soy fan de los chilaquiles. Todo el tiempo estoy probando maridajes con té con todo lo que preparo, y lo uso como ingrediente en mis recetas.

¿Te gusta salir a restaurantes y cuáles son tus favoritos?

Sí, disfruto mucho conociendo cosas nuevas. En Monterrey, uno de mis favoritos es Yokot´an. En este lugar siento todo el cariño que se le pone a cada platillo y me fascinan los sabores auténticos mexicanos. Hace poco estuve en Cau Cau y me sorprendió, así como Sisu, Temakita, Yamato, Kasumi, Benell y Milk, por nombrar algunos. También tengo mis favoritos con estrellas Michelin en Catalunya, donde viví un tiempo, como el Celler de Can Roca, Carme Ruscalleda, Dos cielos y Ca l’Aureli. Este último no tiene estrellas pero es un lugar genial cerca de la playa en Pineda de Mar, Barcelona, que tiene las mejores patatas bravas y exquisita comida mediterránea.  

¿Qué tanto planeas tus viajes alrededor de la comida o restaurantes a visitar?

Comer rico en mis viajes es mi mayor inspiración, es lo que me hace estar presente en cada lugar y documentar mis experiencias. Cuando voy a los jardines de té o países exóticos, confío en el criterio de los locales y pruebo todo lo que parezca interesante, sin embargo en destinos puntuales sí hago una lista  para no perderme de nada.

¿Cuál es tu cocina del mundo favorita y por qué?

Obvio la mexicana en primer lugar, la mediterránea en el verano junto al mar, y podría comer la asiática cada día.

¿Tienes puestos de comida que te gusten más?

Sí, en Guadalajara, mi ciudad natal, hay puestos de comida en cada cuadra. Tengo un lugar favorito por cada zona en la que he vivido. Aquí en Monterrey, me encanta el foodtruck de Nómada.

¿Cuáles son algunos de tus recuerdos más memorables en cuanto a comida?

Las tortillas de harina y el caldo de verdolagas de mi abuela.
Maridaje guiado con Tequila en Guadalajara
Un pato al romero en Praga
Menú degustación en el Celler de Can Roca
Un chai y momos en Nepal

¿Qué no te gusta comer y por qué?

No me gusta la comida chatarra o cargada de químicos y endulzantes. En la medida de lo posible evito establecimientos que innecesariamente sirven todo en plásticos y desechables.