Identificar necesidades: Ser capaz de observar tu equipo de trabajo e identificar el potencial de tu personal es de mucha ayuda para poder encontrar las necesidades en general y, de igual manera, evaluar en qué áreas pueden mejorar o adaptarse tus empleados. 

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Fomentar el aprendizaje continuo: Ofrecer diferentes talleres, seminarios, diplomados o cursos que ayuden a fomentar la constante evolución de tu personal, incluso después de la etapa de capacitación, fomenta no solo las habilidades de tus empleados, sino que también crea un ambiente motivador y con sentido de permanencia entre tu personal. 

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Priorizar en seguridad e higiene alimentaria: Algo que se ha recalcado en diversas ocasiones es la importancia de mantener una reputación favorable sobre tu negocio, en especial por el giro del restaurante. Para trabajar con alimentos y bebidas, es relevante capacitar a tu personal sobre las normas vigentes y regulaciones en la industria gastronómica. 

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Proporcionar retroalimentación: Ofrecer comentarios constructivos durante el periodo de capacitación ayuda a tu personal a identificar sus áreas de oportunidad y poder tener una mejora en su puesto, elevando su perfil laboral y ofreciendo un mejor rendimiento dentro del restaurante. 

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Favorecer el reconocimiento y las recompensas: Celebrar los logros dentro del proceso de capacitación motiva un esfuerzo personal y colectivo entre tu personal, manteniendo un ambiente laboral motivador, beneficioso para tu restaurante.